En esta ocasión vamos a hablar de algo que seguro que a más de uno le ha pasado: estar en la playa, en la montaña, en una cena con amigos… y de repente, el móvil vibra. Notificación del trabajo. ¡Boom! Ahí se acabó el relax.
Y aquí viene la pregunta del millón: ¿Realmente podemos desconectar del trabajo en nuestra vida personal? O peor aún, ¿se nos permite desconectar? Hoy hablamos de la desconexión digital, un derecho que muchos ni siquiera saben que tienen.
¿QUÉ ES LA DESCONEXIÓN DIGITAL?
Venga, definamos esto. La desconexión digital es el derecho de cualquier trabajador a no estar disponible fuera de su horario laboral. Así de simple.
Se trata de no recibir ni responder llamadas, mensajes o correos fuera de horas. Nada de «es solo un minuto», «es un email rápido» o «mira esto y dime qué te parece». Porque, seamos sinceros, ese «minuto» se convierte en media hora y, cuando te quieres dar cuenta, estás trabajando a las diez de la noche.
En muchos países esto está regulado. Por ejemplo, en Francia desde 2017 tienen una ley que protege a los trabajadores de estos abusos. En España, el derecho a la desconexión digital se reconoció en la Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de los Derechos Digitales (LOPDGDD) en 2018, y se reforzó con la regulación del teletrabajo en 2021. Esta ley obliga a las empresas a garantizar el respeto del tiempo de descanso y la intimidad personal y familiar de los empleados.
¿POR QUÉ ES TAN IMPORTANTE?
Vamos a lo serio. No desconectar afecta a la salud. Y no lo decimos nosotros, lo dicen los expertos:
- Estrés y ansiedad: Estar siempre «on» hace que nunca puedas relajarte de verdad. Y eso tiene consecuencias graves.
- Problemas de sueño: Revisar el correo a las 11 de la noche hace que tu cerebro siga en «modo trabajo», y luego no hay quien duerma bien.
- Menos productividad: Parece irónico, pero trabajar más horas no significa ser más productivo. Al revés, el agotamiento hace que rindamos peor.
- Problemas familiares y sociales: Si siempre estás disponible para el trabajo, dejas de estar disponible para tu gente. Así de claro.
- Riesgo de burnout: La fatiga extrema derivada de la hiperconectividad puede llevar a síndrome de burnout, que implica agotamiento físico, mental y emocional.
¿QUÉ PASA SI NO TE RESPETAN ESTE DERECHO?
Aquí viene el problema. No todas las empresas lo respetan. Hay jefes que creen que tener tu número de teléfono es lo mismo que tener un «botón de emergencia» disponible 24/7.
Pero, ojo, si esto pasa hay soluciones:
- Hablarlo con Recursos Humanos. Muchas veces ni siquiera es maldad, sino falta de información.
- Poner límites. No responder fuera del horario, salvo en casos realmente urgentes.
- Solicitar una política de desconexión digital en la empresa. Algunas ya han implementado medidas como la restricción de correos fuera del horario laboral.
- Y si es necesario, denunciarlo. La ley protege a los trabajadores en muchos países, así que conviene informarse bien.
CÓMO PONER EN PRÁCTICA LA DESCONEXIÓN DIGITAL
Vale, vale, todo esto suena genial. Pero, ¿cómo se hace en la vida real? Aquí van algunos trucos:
- Silencia las notificaciones fuera del horario laboral. Si no suena, no estás tentado a mirarlo.
- Crea un correo exclusivo para el trabajo. Así, puedes cerrar sesión cuando termine la jornada.
- Habla con tu equipo. Que sepan que no responderás fuera de horas, y que respeten tu espacio.
- Si eres jefe, da ejemplo. Si un directivo manda correos a las 11 de la noche, la gente se siente obligada a responder. No lo hagas.
- Aprovecha las herramientas digitales. Algunas apps permiten programar respuestas automáticas que indican que responderás en horario laboral.
- Planifica el trabajo bien. Asegúrate de que los temas importantes se tratan en horario laboral para evitar urgencias fuera de horas.
REFLEXIÓN FINAL
La desconexión digital no es un capricho, es una necesidad. No somos robots, no estamos hechos para estar conectados todo el día. Trabajar no es vivir, y vivir no es solo trabajar.
Si queremos ser felices, sanos y productivos, hay que aprender a desconectar. La tecnología nos ha traído muchas facilidades, pero también ha difuminado los límites entre el trabajo y la vida personal. Por eso, cada uno debe tomar el control y exigir su derecho a desconectar.
Así que ya sabes: cierra el correo, apaga el móvil y disfruta de tu tiempo. ¡Te lo has ganado!
Extracto del programa Mediodía COPE en Cantabria. Puedes escuchar el programa completo aquí.